Escuela Profesional
Fundación
La formación profesional como herramienta fundamental para el desarrollo productivo e industrial, dio un importante paso en Zumaia, a comienzos de la década de los 50 del pasado siglo. Con el objeto de mejorar la capacitación de los jóvenes trabajadores surgió el proyecto de crear una escuela profesional.
“Desde hace ya muchos años se consideraba dotar a nuestro pueblo de una Escuela Profesional. Zumaya, pueblo netamente industrial, gozando de amplio prestigio en los ramos industriales a que se ha dedicado, contando con una mano de obra especialmente dispuesta para el trabajo mecánico; necesitaba una Escuela Profesional que, en bien de todos, desarrollara las aptitudes de los obreros.” Así rezaba en la introducción de un escrito que puede considerarse como el documento fundacional o al menos de puesta en marcha de la Escuela Profesional, lamentablemente incompleto, y probablemente, redactado a principios de 1952.
También se decía en el mismo documento “Lanzada la idea de hacer realidad esta aspiración popular, se constituyó una Comisión formada por representaciones del Iltre. Ayuntamiento, Cooperativa Obrera y Centro Parroquial, para solucionar los diversos problemas previos a la creación de una ESCUELA PROFESIONAL.
Hoy después de varios meses de labor, contando con la ayuda económica del Iltre. Ayuntamiento, Cooperativa Obrera e industriales que más abajo se detallan, (falta la hoja donde se detallan) podemos anunciaros que la ESCUELA PROFESIONAL en plan nocturno será un hecho en Octubre del presente año en los locales que antiguamente ocupaba el Centro Parroquial.” Dichos locales estaban en la primera planta del edificio de la Alhóndiga.
En el mencionado documento se describen las condiciones de ingreso y las primeras actividades a desarrollar, que incluyen un examen de ingreso, y en su caso, un curso preparatorio para aquéllos que no lo superen, que se impartiría entre el 10 de marzo y finales de junio del citado año, en los locales del Grupo Escolar de Arrangoleta, de 7 a 9 de la tarde.
También se concretan los estudios que se cursarán a partir de octubre: Cultura General, Dibujo, Aritmética y Álgebra, Física y Tecnología.
Y los promotores lanzaban el siguiente mensaje: “¡ZUMAYANOS: EN VUESTRAS MANOS ESTARÁ EN ADELANTE EL DESTACAR EN VUESTRA PROFESIÓN!”
Se creó un Patronato, como órgano rector de la Escuela, formado por representantes del Ayuntamiento, Cooperativa Obrera, otras entidades y empresas industriales que prestaron su apoyo, Otto Holke, Balenciaga, S.A. y Carmelo Unanue, entre otros. Además de Eduardo Zubia, que ocupó el cargo de Presidente, fueron miembros del Patronato Manuel Antía, Akilino Elosua, Otto Holke, Iñaki Ajuria, Matías Carballo, José Luis Alberdi y José Ignacio Apestegui, entre otros, actuando de Secretario José Ramón Zubia.
Los primeros profesores de la Escuela fueron: Eugenio Zabarte y José Cruz Echeverria de Arrasate; Juan José Zabala, Manuel Regalado e Iñaki Beobide de Zumaia, y Alberto Balenciaga, de Zarautz, siendo Eugenio Zabarte el primero en impartir las disciplinas técnicas de tecnología y dibujo técnico.
Cesión a la Obra Sindical de Formación Profesional
La Junta de Patronato, en sesión extraordinaria celebrada el 15 de marzo de 1953, acordó la cesión de la Escuela a la Obra Sindical de Formación Profesional, perteneciente al Sindicato Vertical, manteniéndose el Patronato como órgano de gobierno, solicitando al Ayuntamiento el traspaso a dicho Organismo de los locales en donde se halla instalada la Escuela, en las mismas condiciones que se fijaron en su día al Patronato. En adelante, la Escuela pasa a denominarse Escuela Sindical de Formación Profesional Virgen de Arritokieta. En el curso escolar 1953-54 contaba con 17 alumnos y se dio comienzo a las clases diurnas, con una jornada de 9:00 a 12:00 de la mañana y de 2:00 a 6:00 de la tarde, siendo también lectivo el sábado. Señalar que la Escuela era gratuita.
La dirección de la Escuela fue asignada al superior que regentaba la escuela de los Mercedarios Descalzos, en el edificio de Ubillos, siendo primero José Chimeno, hasta el curso 1958-59 y después Rafael Bragado.
Estando José Chimeno de director se produjeron renovaciones en el cuadro de profesores con la llegada de Juan Garitano y Francisco Iraola, ambos de Zegama, que se encargaban de las prácticas de taller y de la asignatura de Tecnología, de Clamades Blanco que impartió las materias de física, química y dibujo, y varios frailes de la orden de Mercedarios Descalzos que se encargaban del resto de asignaturas como matemáticas y lengua española. La asignatura de Formación del Espíritu Nacional, que si bien su objetivo era el de infundir a los escolares el espíritu y la doctrina del Movimiento Nacional, en la práctica era considerada como la clase de gimnasia, que era atendida por profesores designados por el Ministerio de Educación Nacional, a propuesta de la Delegación Nacional del Frente de Juventudes; José Luis Samaniego y Santiago Araujo fueron algunos de ellos.
En sesión celebrada el 10 de febrero de 1954, el pleno del Ayuntamiento acordó ceder con carácter gratuito y por tiempo indeterminado, la mitad del local de la planta baja de la Alhóndiga Municipal, para la instalación del taller “para la enseñanza práctica de mecánica” autorizando la ejecución de las obras necesarias para ello.
Por Orden del 7 de abril de 1959 del Ministerio de Educación Nacional es clasificado como Centro no oficial “autorizado” de Formación Profesional Industrial, correspondiente únicamente, al Grado de Iniciación Profesional (Preaprendizaje), impartiéndose el segundo curso de este grado. No obstante y sin contar con la oportuna autorización, se impartían otros dos equivalentes a los primeros cursos del Grado de Aprendizaje (Oficialía Industrial), hasta el curso escolar 1961-62 y los tres cursos de este grado a partir de 1962-63. Esto ocasionó problemas a aquéllos alumnos que intentaron continuar los estudios de Maestría Industrial en otro centro, al no contar con el título de Oficialía Industrial.
Esta carencia fue resuelta por la Orden del 27 de enero de 1964 del Ministerio de Educación Nacional al clasificar como Centro no oficial “autorizado” de Formación Profesional correspondiente al Grado de Aprendizaje en las especialidades de ajuste-torno de la sección mecánica de la Rama del Metal, debiendo realizarse la inscripción de matrícula de sus alumnos en la Escuela de Maestría Industrial de Donostia.
El incremento del número de alumnos producido en la segunda mitad de los años 50, demanda un mayor espacio, sobre todo en los talleres. Así, por resolución de la ‘Obra Sindical del Hogar y de Arquitectura’, del 10 de marzo de 1961, se publica el anuncio del concurso-subasta para la adjudicación de las obras de ampliación y reforma de la Escuela, previa cesión del Ayuntamiento de la otra mitad de la planta baja de la Alhóndiga. Gracias a estas obras se amplió el taller y se habilitó un aula de dibujo en la entreplanta donde se encontraba el despacho de Dirección y Secretaría de la Escuela.
Por decreto 2058/1972, de 21 de julio, de la Presidencia del Gobierno, en el plazo de dos años de la entrada en vigor de la Ley General de Educación, se establece la integración de la Escuela en el sistema educativo general, como Centro no estatal de enseñanza de Formación Profesional.
La Escuela continuó con su labor hasta el curso 1983-84. Durante los treinta años de funcionamiento pasaron por sus aulas y talleres 1.786, jóvenes comprendidos entre los 13 y 17 años, oscilando el número de alumnos de cada curso escolar entre los 17 del curso 1953/54 y los 102 del 1976/77, terminando con 19 el último curso.