Máquinas-herramienta y otras
La máquina-herramienta llega a Zumaia de la mano de Otto Holke, de nacionalidad alemana, cuando el año 1935 adquiere las instalaciones de Talleres Askar, que anteriormente pertenecieron a Yeregui y Compañía, para iniciar la fabricación de máquinas fresadoras del tipo universal. La cultura industrial generada en la villa desde principios de siglo y la existencia de mano de obra cualificada en la rama mecánica, debieron ser factores que influyeron en Otto Holke, un gran y reconocido técnico, al decidir establecerse en Zumaia.
Con posterioridad se dieron varias iniciativas, que junto con Holke, constituyen el conjunto de empresas del sector:
- Otto Holke, fresadoras universales y de torreta.
- Julian Eguiguren, tornos paralelos.
- Industrias Satesa, tornos paralelos.
- Talleres Aizape, fresadoras.
- Urpemak, tornos, mortajadoras y sistemas de inyección.
- Egurko, S. Coop., maquinaria para trabajar la madera.
Hubo otras dos empresas, que aunque su actividad principal fue otra, hicieron alguna incursión en la máquina-herramienta: Industrias Mecánicas Autornifer, que fabricó algunos tornos paralelos y Talleres Arritoquieta, que fabricó taladros de sobremesa. También cabe mencionar a Talleres Beal que fabricó, por encargo, diversas máquinas, como cortadoras y enrolladoras o curvadoras de chapa, taladros y tornos, en su mayoría para la empresa Balenciaga, S.A., y a Talleres Urgain, que produjo subconjuntos (delantales, charriots y cajas Norton) para los tornos ‘Echea’, de Hernani, y máquinas para trabajar la madera, antes de fusionarse con Industrias Zumaia, para la creación de Egurko, S. Coop.